Hola, mi nombre es Cecilia y soy la directora ejecutiva de OLIVIA COOPER Beauty Lab.
Me dedico a la estética desde hace unos 18 años y comencé este camino cuando decidí dejar la universidad de idiomas (en la que estaba obteniendo excelentes resultados) para seguir mi "vocación" La pasión por el cuidado personal ha sido parte de mí desde siempre. desde pequeña, sobre todo el cuidado facial.
Después de años de experiencia en otros centros, por fin puedo abrir mi lugar favorito, en el que desde hace 3 años he puesto todo mi compromiso y honestidad para acompañar a mis clientes por caminos que les ayuden a sentirse mejor, mimarse y celebrarse. , porque con demasiada frecuencia nos tratamos a nosotros mismos como la última rueda del carro.
El paso del producto surge ciertamente de una necesidad de creación mayor, porque pretende estar presente en muchas realidades, no sólo dentro de mi centro. La elección de los productos faciales surge porque, si en mi opinión una crema anticelulítica no puede resolver una imperfección tan compleja, que tiene una raíz mucho más profunda y compleja, el rostro es una zona en la que si trabajamos bien podemos puede intervenir de manera decisiva e impactante.
A menudo, cuando un cliente acude a un centro para un tratamiento facial, tras el diagnóstico existe una tendencia a cambiar todo el protocolo de cuidado de la piel en casa (si el cliente lo hace).
Considero que es una elección necesaria sólo si, tras un cuidadoso diagnóstico, el técnico se da cuenta de que las cremas utilizadas en casa son completamente incorrectas; pero desafortunadamente esto no suele suceder porque tendemos a vender el paquete completo.
Siempre he trabajado pensando que tenía que ganar dinero, pero primero es la verdad y el respeto hacia quienes recurren a mí.
Así que me ha pasado varias veces que me he visto en la necesidad de recomendar simplemente un limpiador diferente al cliente y sin sorpresa fui testigo de maravillosos cambios y satisfacción en el estado de la piel del cliente que pidió mi ayuda.
Impulsada por un sentido de evolución empresarial y amor por mi trabajo, hoy decidí comenzar con productos de limpieza que son la base de una piel verdaderamente sana.
Mis padres son sin duda mi mayor inspiración humana, laboral y emprendedora.
Mi papá logró hacer grandes cosas de la nada, solo, sin ninguna certeza de lo que hubiera sido.
Poder alcanzar aunque sea la mitad de las metas que logró sería para mí una satisfacción y alegría infinita; para mí es la demostración de que el compromiso, el trabajo duro y la perseverancia siempre dan sus frutos.
Mi mamá del otro lado siempre ha sido mi pilar emocional; él siempre me impulsó a creer en mí mismo y a crear mi propia independencia.
Siempre presente en cada momento de mi vida, ella ciertamente ha sido y sigue siendo mi mayor apoyo.